
En la presentación de estas jornadas del Día Internacional de la
Mujer Trabajadora se plantea la necesidad de obtener instrumentos
de reflexión para poder analizar el porqué de la violencia y las
agresiones hacia las mujeres . Sin embargo, al ser invitada a participar
en este debate me pareció conveniente ampliar el campo de la violencia
y los malos tratos al de la familia en su conjunto, pues es en el seno
social familiar donde surge una dinámica interrelacional compleja, y es
el lugar por excelencia en el que brota el germen -la semilla- de la
pulsión agresiva .
Yo me referiré específicamente a la relación padres/hijos, matriz de
configuración de las relaciones y vínculos interpersonales durante la
adolescencia y vida adulta .
Estado de la cuestión
En primer lugar, tengo que destacar que la violencia parental existe . Los
datos lo confirman, los profesionales (médicos, abogados, psicólogos)
lo comprobamos a diario ; las páginas de los periódicos, los programas
de televisión, las campañas de prevención han revelado parte de la magnitud
de la situación .
Cuando las familias acuden a consultar por este problema, aparecen
datos que nos ayudan a entenderlas : son aspectos que generalmente se
repiten, como por ejemplo :
-factores de privación económica
-situaciones de carencia afectiva, abandonos, separaciones
traumáticas, duelos tempranos ;
-malos tratos o abusos sufridos por los progenitores (a veces se
sintieron amados de esta manera, otras sólo se sintieron odiados) ;
-violencia, malos tratos o abusos padecidos de generación en
generación;
-enfermedad mental, alcoholismo o delincuencia de alguno de
los padres;
-uno de los dos progenitores (padre o madre) consintió, negó,
ocultó o mantuvo indiferencia ante lo que sucedía . A veces la víctima
(niño, madre o padre, anciano) siente más rabia contra ése que no defiende
que contra el que agrede o abusa. Por lo tanto, la persona agredida
es tanto víctima del agresor como del silencio que muchas veces le
acompaña.
Mujer Trabajadora se plantea la necesidad de obtener instrumentos
de reflexión para poder analizar el porqué de la violencia y las
agresiones hacia las mujeres . Sin embargo, al ser invitada a participar
en este debate me pareció conveniente ampliar el campo de la violencia
y los malos tratos al de la familia en su conjunto, pues es en el seno
social familiar donde surge una dinámica interrelacional compleja, y es
el lugar por excelencia en el que brota el germen -la semilla- de la
pulsión agresiva .
Yo me referiré específicamente a la relación padres/hijos, matriz de
configuración de las relaciones y vínculos interpersonales durante la
adolescencia y vida adulta .
Estado de la cuestión
En primer lugar, tengo que destacar que la violencia parental existe . Los
datos lo confirman, los profesionales (médicos, abogados, psicólogos)
lo comprobamos a diario ; las páginas de los periódicos, los programas
de televisión, las campañas de prevención han revelado parte de la magnitud
de la situación .
Cuando las familias acuden a consultar por este problema, aparecen
datos que nos ayudan a entenderlas : son aspectos que generalmente se
repiten, como por ejemplo :
-factores de privación económica
-situaciones de carencia afectiva, abandonos, separaciones
traumáticas, duelos tempranos ;
-malos tratos o abusos sufridos por los progenitores (a veces se
sintieron amados de esta manera, otras sólo se sintieron odiados) ;
-violencia, malos tratos o abusos padecidos de generación en
generación;
-enfermedad mental, alcoholismo o delincuencia de alguno de
los padres;
-uno de los dos progenitores (padre o madre) consintió, negó,
ocultó o mantuvo indiferencia ante lo que sucedía . A veces la víctima
(niño, madre o padre, anciano) siente más rabia contra ése que no defiende
que contra el que agrede o abusa. Por lo tanto, la persona agredida
es tanto víctima del agresor como del silencio que muchas veces le
acompaña.
No hay comentarios:
Publicar un comentario